Orquesta Sinfónica de Castilla y León
Andrew Gourlay, director
Nikolai Lugansky, piano
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Descargar programa Ver programaFestival Rajmáninov
Serguéi Rajmáninov (1873-1943)
26 de enero:
Sinfonía n.º 3 en la menor, op. 44 y Concierto para piano n.º 3 en re menor, op. 30
27 de enero:
13:00 h Recital de piano. Preludios: del op. 23 los nos 1, 3, 4, 5, 6, 7, 8 y 9; y del op. 32 los nos 1, 2, 3, 4, 5, 8, 12 y 13.
Gratuito para abonados de temporada de segundo turno, de sábado y de proximidad de la ruta 1 y 10, tendrán un periodo preferente para retirar sus invitaciones hasta el 23 de enero; El resto de abonados podrán retirar su invitación, una vez haya concluido el periodo preferente, entre el 24 y 26 de enero de 2018 en el horario habitual de taquillas, hasta completar aforo.
20:00 h Sinfonía n.º 1 en re menor, op. 13 y Sinfonía n.º 2 en mi menor, op. 27
Después de que Jesús López Cobos y Javier Perianes hayan interpretado los cinco conciertos para piano de Beethoven en dos sesiones, este año volveremos a disfrutar con un «festival» en el que se podrá escuchar un inusual número de obras de un solo autor. Será protagonizado por Serguéi Rajmáninov, del que se podrán escuchar sus tres sinfonías y el gigantesco Concierto para piano n.º 3, todo un tour de force para cualquier intérprete. Además, se celebrará un recital pianístico y otros eventos alrededor del compositor ruso.
El encargado de llevar a buen puerto la parte solista será el excepcional pianista Nikolai Lugansky. Alumno de la mítica Tatiana Nikoláyeva, ha ganado premios como tres Diapason d´Or y dos Echo clásicos. Él mismo afirma que Rajmáninov es su «padre espiritual», y la crítica lo ha encumbrado como uno de sus mejores intérpretes en la actualidad. Así, en El Periódico, a propósito de su interpretación en recital, publicó: «Donde el músico destapó el tarro de las esencias fue con Rajmáninov (…). Virtuosismo, ágil transcripción de las notas y atmosférico y cromático viaje por la variedad de temas (…) dejó anonadado al personal (…) puso en pie a los entregados espectadores».
Tampoco es fácil, ni mucho menos, la tarea del director titular, Andrew Gourlay, que tendrá que vérselas con obras que requieren de gran habilidad técnica para conseguir todo su efecto, pues hay que desentrañar con paciencia la intrincada escritura melódica de este compositor, y –lo más complicado– saber dotar de tensión gradaciones que tardan en culminar. Si tenemos en cuenta lo que El Norte de Castilla afirmó sobre Gourlay («posee una técnica notable que se aprecia en el modo de distinguir los planos sonoros, buscando la claridad y el equilibrio»), podemos pensar en que este festival Rajmáninov se abordará con serias garantías.